Científica que acabó metida de lleno en el mundo de los esports. Prefiero pedir perdón que permiso. Desde que me independicé sobrevivo a base de macarrones con tomatico
y nunca hago la cama y por eso siempre tengo una sonrisa en la cara. Dentro de mi caos existe un orden aunque el resto no llegue a comprenderlo. Soy patosa y siempre tengo sueño. Jamás podría decir que
no a una maratón de Harry Potter, y si, las palomitas las pongo yo.